Destilería familiar de whisky del norte de Illinois
Destilería Whiskey Acres en el condado de DeKalb
Jan 01, 2016 - Bodegas
Las bebidas espirituosas se destilan en la granja de la familia Walter, en Whiskey Acres. En el condado de DeKalb, en el norte de Illinois, las carreteras rurales dividen hectáreas de campos de cultivo en rectángulos ordenados como gigantescas tartas de chocolate. Las turbinas eólicas que brotan de las llanuras se arremolinan en brisas perfumadas como pan recién horneado. Pero los embriagadores olores no proceden de la acogedora cocina de una granja. La familia Walter está cocinando alcohol en la única destilería agrícola de Illinois.
Whiskey Acres Distilling Co. elabora el único bourbon, whisky y vodka del estado a partir de semillas de cereales sembradas, cultivadas, cosechadas, destiladas, envasadas, embotelladas y vendidas en la misma parcela de tierra fértil de Illinois. Desde la década de 1930, la familia Walter ha cultivado las 2.000 hectáreas que rodean la granja de tablillas blancas donde creció Jim Walter, su esposa desde hace 45 años, Sue, prepara abundantes comidas y las entrega a los trabajadores agrícolas, y juntos criaron a tres hijos.
"Todos ellos son mis hijos favoritos", dice Sue.
Pero el mayor, Jamie, heredó el talento de su madre para cocinar whisky. Es agricultor de quinta generación y autoproclamado "abogado en recuperación" reconvertido en destilador, presidente y consejero delegado de la empresa familiar Whiskey Acres. Su esposa Kristen es la responsable financiera y de cumplimiento de la destilería. En 2011, los cambios en las leyes estatales sobre bebidas alcohólicas plantaron la semilla en la cabeza de Jamie para producir bebidas espirituosas a partir de su grano de alta calidad. Convertir los cultivos en ingredientes para cócteles no era algo nuevo para Jamie, que anteriormente se había asociado en un negocio de vinos de California. La familia Walter apostó por la granja, abriendo Whiskey Acres en 2013.
Producción propia
Anualmente, Whiskey Acres produce hasta 70.000 botellas de bourbon, centeno, whisky de maíz, vodka y una serie artesanal de bourbons de pequeña producción. Whiskey Acres es sólo la segunda "destilería de granja certificada" del país, una distinción del American Distilling Institute que se concede a las instalaciones que producen bebidas espirituosas a partir de cereales cultivados en la misma granja donde opera la destilería.
Desde mediados de marzo hasta noviembre, el público es bienvenido para catas y visitas a la granja y la destilería, donde tiene lugar "la cocción", que es como los destiladores llaman al proceso de elaboración del alcohol. Jamie dice: "En su forma más simple, la destilación es una reacción química que concentra el alcohol producido. En diferentes puntos de ebullición, el repetido proceso de vaporización y condensación elimina las impurezas".
Ésta es la receta familiar de Whiskey Acres: mezclar agua del acuífero subterráneo de piedra caliza de la granja con 1.000 libras de grano recién molido, llamado mosto. Se hierve en un tanque de acero inoxidable de 500 galones durante cinco horas. Verter en tanques con levadura viva. Fermentar cinco días, convirtiéndola en cerveza de destilería (es la fermentación la que infunde al aire el aroma del pan horneado). Ahora toma el relevo Flo, el alambique de 500 galones que lleva el nombre de varias mujeres de la familia Walter. Dentro de su curvilínea barriga de cobre, la cerveza color caramelo se convierte en alcohol cristalino. Se almacena en un depósito de acero inoxidable dividido, que captura el alcohol más puro.
El destilador y cofundador de Whiskey Acres, Nick Nagele, también agricultor, cata los lotes para determinar la calidad. Nick afirma: "El trabajo del destilador es muy parecido al de un chef. Medimos y mezclamos los ingredientes, controlamos el proceso de cocción para asegurarnos de que el lote no se queme y catamos la calidad". Una vez superada la prueba de sabor del destilador, el alcohol se embotella o se envasa en barriles y se almacena durante años en un edificio acanalado de acero galvanizado al aire libre, con forma de medio barril gigante de whisky, hasta que está listo para beber.
Los visitantes degustan la maestría de los licores de Whiskey Acres en la barra de madera reciclada de un establo lechero de 1900, ahora sala de catas. Jamie y Nick enseñan a los visitantes a beber, distinguir y saborear los licores que elaboran. Encima de la chimenea de piedra, una fotografía de 1890 muestra a generaciones de granjeros de la familia Walter reunidos en torno a un barril de whisky abierto. Desde detrás del cristal enmarcado, son testigos del fruto de las semillas que sembraron y los licores que Illinois elaboró.
