Vamos a almorzar

Olvídate de los huevos revueltos: estos restaurantes de Chicago reinventan la comida matutina más sorprendente del fin de semana.

La carne de cerdo manda en The Publican, el popular restaurante neoamericano de Paul Kahan, chef y restaurador. Desde los enormes cuadros de cerdos gordos que adornan las paredes hasta los rincones privados para sentarse y el menú centrado en la carne de cerdo, este lugar está loco por los cerdos. Sin embargo, el servicio de brunch de The Publican mezcla un poco las cosas para aquellos que buscan platos no porcinos.

Mientras nos sentamos en una larga mesa comunal en el espacioso comedor que toma más de unas pocas señales de una cervecería alemana, nos entregan menús que incluyen una lista de ostras, además de varios platos de huevo y opciones golosas. El menú cambia a diario, pero nos resistimos a tentadores platos como el revuelto de cangrejo y el zeppole de manzana y ricotta, y preferimos los que llevan la carne de cerdo característica de The Publican. La porchetta benedict, un asado de cerdo servido con bernaise calabresa y huevo escalfado, no decepciona. Tampoco decepciona el scrapple de panceta de cerdo, servido con huevos al sol y un par de rebanadas de masa madre para absorber hasta el último bocado delicioso. Los clientes habituales saben que un pedido no está completo sin una guarnición del famoso bacon braseado con sirope de arce de corte grueso.

Tampoco hay que pasar por alto las bebidas. Además de los básicos del brunch, como mimosas y Bloody Marys, el restaurante también sirve cócteles con cerveza, como el Brunch Box, que lleva licor Amaro Montenegro, cerveza y zumo de pomelo.

Si bien está garantizado que saldrás saciado (todo esto es bastante pesado), el Publican Quality Meats del restaurante es una carnicería-panadería-cafetería justo al otro lado de la calle, donde puedes comprar carnes, pasteles y sándwiches para llevar a casa. Ambos lugares rinden homenaje al pasado carnicero del barrio, aunque el histórico distrito de Fulton Market es más conocido hoy en día por sus cada vez más numerosos restaurantes y bares de lujo.

El brunch se sirve sábados y domingos, y se aceptan reservas.

El célebre y humilde chef Rick Bayless está detrás de este vibrante restaurante que lleva casi 30 años sirviendo versiones modernas de la cocina tradicional mexicana en el barrio de River North. A pesar de la fama que Bayless se ha ganado gracias a su programa de cocina México: One Plate at a Time, junto con sus libros de cocina y su popular línea de productos de supermercado, el brunch en Frontera Grill sigue siendo un asunto informal y accesible. Nos sentaron nada más llegar, todo un logro para un restaurante tan popular en el centro de la ciudad un sábado al mediodía.

El comedor, pintado en una alegre paleta de naranjas y amarillos acentuada con pinturas brillantes y arte popular mexicano, está lleno de cafeína y conversaciones alimentadas por margaritas. Turistas y lugareños se reúnen para degustar tentadores platos de huevo y bocadillos callejeros mexicanos, elaborados principalmente con ingredientes locales cultivados de forma sostenible. El menú cambia con las estaciones, normalmente mes a mes.

Optamos por la carne asada al estilo oaxaqueño, un buen plato de bistec de costilla marinado en chile y servido con huevos, plátanos y guacamole. También probamos los sapitos, un trío de tortas de masa de maíz al estilo de Xalapa servidas nadando en una salsa de chipotle y frijoles negros y cubiertas con huevos revueltos, pollo y chorizo. Para los que evitan la carne, también son muy recomendables los chilaquiles con salsa de guajillo y los huevos rancheros con salsa de tomate asado y tortillas caseras. Y nunca es demasiado temprano para degustar el famoso guacamole de Frontera, servido fresquísimo con patatas fritas crujientes y ligeramente saladas.

A la salida, no dejes de visitar la zona del bar, donde encontrarás a la venta algunos divertidos recuerdos relacionados con Bayless, como sus libros, salsas y un café Frontera personalizado de Intelligentsia.

El brunch sólo se sirve los sábados.

The Dawson es uno de los lugares de moda de West Town, gracias a sus dos acogedores patios (uno de ellos en la segunda planta). Pero no hace falta esperar a que haga buen tiempo para cenar en este restaurante de bonito diseño, ubicado en lo que antiguamente fue la empresa de mantas para chimeneas Dawson Brothers (de ahí el nombre). Al entrar, las enormes puertas de madera se abren a un atrio de techos altos, lleno de luz matinal. Estamos de suerte porque no hay que esperar y una camarera nos lleva directamente a un cómodo reservado frente a la barra. Todo el espacio está inspirado en el pasado industrial de la zona, con vigas de madera recuperada, ladrillos a la vista y rejas de acero con ventanas de estilo industrial.

Abrimos nuestros menús a la colección de ofertas de brunch del chef ejecutivo Shaun King, que incluye versiones actualizadas y de inspiración global de viejos platos favoritos. Nuestro camarero nos recomienda el sándwich BEALT, una versión del clásico BLT que incluye un desayuno completo entre dos rebanadas de brioche: bacon, huevo, aguacate, lechuga, tomate, queso cheddar y jamón. ¿No te parece suficiente? Añade langosta por 10 $. Si le apetece más un desayuno clásico, nos decantamos por el Steak & Eggs, un bistec de falda marinado en cítricos servido con una sabrosa salsa chimichurri sudamericana, huevos a su gusto y tostadas tejanas. El picadillo de verduras sin carne resultó igual de satisfactorio. Venía con un huevo frito, calabaza, hinojo, tofu y un panecillo de pan de maíz, todo ello bañado en una rica salsa de setas.

Cuando se trata de bebidas, no se detenga en el café fuerte y delicioso o en los cócteles perfectamente ejecutados. El bar también es conocido por sus refrescos caseros, entre los que destaca el Greyhound, que mezcla pomelo, sirope de gomme de piña, bergamota anaranjada y enebro en un delicioso refresco.

El brunch se sirve tanto el sábado como el domingo, y se aceptan reservas.

Sunda, Chicago

Este imán de famosos que sirve comida neoasiática lleva al extremo la clásica cura para la resaca con su Sumo Bloody Mary. La bebida de 32 onzas está "aderezada" con beicon, un trozo de sándwich de queso tocino a la plancha, un panecillo de pato, un rollo de sushi y demasiadas cosas más como para mencionarlas. Precio: 40 $.

Twisted Spoke, Chicago

Otra comida en un vaso servida con una guarnición de bloody, el Road Rash Mary presenta una mezcla casera con un poco de cerveza, aderezada con salami, pepperoncini, cebollas de cóctel y queso parmesano. ¿Salud o buen provecho?

Restaurante, bar y panadería GreenFire, Rockford

Demostrando que el Bloody Mary no tiene que ser extravagante para ser delicioso, este local de Rockford sirve una excelente y equilibrada versión tradicional, fresca, ácida y sabrosa.

Miss Kitty's Grape Escape, Galena

¿Así que prefiere preparar su propio Bloody Mary personalizado, con todas sus guarniciones favoritas? Este es el lugar para hacerlo, en el Bloody Mary Buffet de los sábados, con todos los ingredientes clásicos.

La Bodega, Carbondale

Este modesto bar tiene una gran reputación por los mejores Bloody Marys de la ciudad. Acércate a tomarte uno en la barra -es una versión excelente y generosamente aderezada del clásico- o llama antes para pedir una jarra de la mezcla y llevártela a casa.